Esa mañana nos despedíamos de Dubrovnik. Habíamos planeado un dia de ruta rumbo a Orebić, en la punta sur de la península de Pelješac. Desde ese pequeño pueblo costero, íbamos a tomar el ferry que cruza a Korčula, lugar de nacimiento de Marco Polo. Korčula fue uno de los primeros destinos que listamos para conocer en Croacia, pero primero, toda mi emoción estaba puesta en la ruta.

“Esta vez, aun más que las veces anteriores, lo importante es el camino más que el destino” le dije a Car. El plan erapasar por la ruta del vino de Dubrovnik. Un camino que pasa por decenas de pequeñas bodegas familiares rodeadas por sus propios viñedos que caen de los cerros.

viñedos
Los viñedos bajan desde los cerros

La ruta de Dubrovnik a Orebić es directa, pero íbamos a realizar algunas paradas en el medio. Investigando previamente, había visto algunas bodegas interesantes para conocer y así poder comenzar a introducirme en el conocimiento del vino croata. En Croacia, el enoturismo existe, pero su desarrollo es mínimo cómo su propia industria vitivinícola.

La cepa principal, con la que esta plantada casi la totalidad de la región, es la Plavac Mali, descendiente de la uva Zinfandel que hoy podemos encontrar en California. Plavac Mali es una cepa exclusivamente croata y seria muy extraño encontrarla en otro país. Los vinos de mejor calidad de Croacia están realizados con esta cepa.

Croacia
Carteles por toda la ruta indicando las bodegas

LA RUTA DEL VINO DE PELJESAC

Lo que se conoce como la ruta del vino de Drubovnik es realmente la ruta del vino de Pelješac, una península que surge unos kilómetros a la noroeste de Dubrovnik. Esta ruta no tiene una gran carga de turismo ya que la mayoría toma la ruta que sigue recto destino Split o algún puerto que cruce a Hvar.

La ruta 414 expone uno de los paisajes más lindos del país. A los costados, los viñedos bajan de las colinas como si fuese una avalancha color verde. Cada pocos metros, carteles de diferentes estilos, algunos hechos a mano, otros con un poco más de producción,indicanuna nuevabodega. La mayoría sonpequeñas, familiares, poseencasas donde añejan no más de quince o veinte barricas a la vez. Que las estructuras no sean mucho más grandes que las de una casa rural, me hace pensar que el vino, en Croacia, además de un negocio, es una tradición familiar que ha sido heredada por varias generaciones.

bodega
Típicas bodegas de la zona

Durante el trayecto intenté detectar alguna bodega grande, pero me fue muy difícil diferenciarlas de las familiares, todas se ven como casas de campo. Dentro algunas tienen un bar de vinos y otras, degustaciones gratis al público. En ese momento, había algunas que estaban cerradas, y que vendían sus productos solamente si uno las conocía previamente y tocaba directamente la puerta, como quien ya es cliente de confianza.

La ruta pasa por caminos llanos y por barrancos donde hay que esperar detrás de las curvas que no venga nadie para cruzar cerca del precipicio. Pasamos por valles donde el fuego hizo estragos hace años y el paisaje se vuelve post apocalíptico, árboles grises, quemados, esperando quebrarse y caer sobre un pasto verde que ya está recuperado, dando como resultado un mix de colores entre verde y gris. Durante gran parte del trayecto, el camino se debate entre el azul oscuro Mar Adriático y la pared de piedra, a la que le pedimos casi de rodillas que no se desarme. A esta ruta no le falta nada para ser un gran circuito turístico, tal vez un poco de promoción y tiempo

BODEGA MILOS

Llegué a mi primer destino, la bodega Milos. Una bodega ubicada en la primera parte de la ruta. La casa parecía vacía. Me acerqué a una antigua puerta de madera, golpeé, pero nadie se asomó.

Luego de un rato salió a recibirme alguien, era el dueño. Una persona joven que, por su edad, parecía haber heredado este tradicional negocio. La bodega era pequeña, había no más de un par de decenas de barricas de roble. Cuando pregunté, sabiéndome poco conocedor del tema, qué cepas tenían, el dueño me contesto “la única de la región, Plavac Mali”. Me lo dijo con un tono y un gesto, como quien tiene miedo de desilusionar a alguien. Yo me entusiasmé, y espero habérselo transmitido con mis palabras.

¡Una cepa de la cual nunca había escuchado hablar! Interesante.

La bodega tenia armado un mueble y una mesa en un cuarto separado para poder hacer una cata. Yo estaba solo, así que atiné a pedirle que me diera de degustar los dos productos que me interesaban. El proceso es sencillo, solo producen la cepa estrella, Plavac Mali. Los preciosde los diferentes vinosque ofrecen están dados por dos cosas: la madurez y la añada. Luego, el contenido es el mismo. Compré uno intermedio, para poder probar también como envejece un vino croata. Volví al auto y seguimos camino.

El viaje estaba demorando más de lo previsto, pero no nos dábamos cuenta que el tiempo pasaba volando. ¿Sera que cuando el paisaje es perfecto, el tiempo se apura? Como quería llegar temprano a Orebić, decidí solamente hacer una parada más en el camino. La ultima bodega estaba muy cerca de nuestro hospedaje y prometía ser más grande y preparada que los anteriores.

La ruta cerca de Milos

BODEGA KORTA KATARINA

La bodega Korta Katarina, era a simple vista más grande que las anteriores. La construcción transmitía inversión y empresa, no solo tradición familiar. Al Plavac Mali, ahora hay que sumarle la cepa blanca autóctona de Croacia: Pošip. El lugar tiene la posibilidad de reservar catas de vino, con o sin maridaje. Yo fui sin reserva y pude degustar algunos que tenían aireándose para una cata reservada. Si bien, tanto el Plavac como el Pošip, no son de mis cepas preferidas, podemos destacar que valen la pena ser probadas.

Korta Katarina

Yo siempre intento buscar similitudes entre cepas. Tanto en olfato, como en sabor hay varios hilos conductores entre varias cepas. La Plavac Mali la noté similar al Syrah de la Cote de Rhone, pero con un poco menos de acidez y menos cuerpo. También el aroma es similar: mora, pimienta y especias. La Pošip fue un poco más difícil, su aroma a almendra me recuerda el Viognier pero tampoco puedo decir que sea muy similar.

Les recomiendo que, si alquilan un auto en Croacia, hagan esta ruta. Recórranla, frenen, saquen fotos, golpeen puertas y prueben los vinos que la región tiene para ofrecer. Si descubren por internet alguna que les guste mucho, reserven. La ruta vale la pena ser recorrida por su gente y sus paisajes. Seguramente haya muchas más bodegas para recorrer que las dos que yo menciono, cada una con su atractivo. Si vas con alguien que sabe tanto o más que vos, la experiencia va a ser mucho más enriquecedora.

Espero con ansias volver a Croacia y poder hacer una degustación guiada con algún enólogo o sommelier.

INFORMACIÓN

BODEGA MILOS:  www.milos.hr

BODEGA KORTA KATARINA:   www.kortakatarina.com