Estaba ansioso, Coupette había sido nombrado el bar con mejor apertura del año 2017 y su cocktail Champagne Piña Colada había sido el cocktail del que todos los medios especializados hablaban. Pensé en reservar, tal vez no conseguiría lugar un sábado a la noche, así que decidí hacerlo. Era sábado pre Halloween y las calles de Londres se teñían de disfraces y borracheras. Ningún lugar parecía lleno, toda la fiesta sucedía en la calle, desde temprano, así que había varios heridos de alcohol acostados sobre la vereda.
La fachada aún tiene el cartel del antiguo bar que funcionaba ahí “CHARRINGTONS, Ales-Stout”, el cartel es antiguo, con algunas letras completamente despintadas, olvidado. Pero lo conservan con vida, como queriendo mantener el alma under de un pub típico londinense. Debajo, una entrada azul, con un pequeño logo que dice COUPETTE. Adentro, la cosa cambia completamente.



EL BAR
El bar está inspirado en Francia: champagne y calvados son las estrellas sobresalientes de la noche. El cocktail insignia es Apple, una simple mezcla de jugo de manzana y calvados que cambia tanto la marca del calvados como el tipo de manzana cada cierto tiempo, para que el cocktail nunca sea el mismo. El edificio, de 160 años de antigüedad, tiene como decoración ladrillos a la vista y una lámpara colgante de metal utilitaria. Detrás de la barra, hay estanterías aéreas que separan los diferentes tipos de bebidas. La barra, tiene su punto de distinción en la superficie, la cual está completamente revestida con monedas vintage de 10 francos franceses.



Coupette queda en el barrio hipster de Bethnal Green, un poco alejado al este de Shoreditch. No es un barrio multitudinario ni tampoco, por suerte, lo es el bar. Si bien contábamos con reserva para una mesa, nos sentamos por elección en la barra, como siempre. Pasadas las diez de la noche el bar se lleno completamente, pero no había nadie parado. Así que, aunque estuviese lleno, me seguía pareciendo un bar tranquilo e íntimo.
Nuestro anfitrión de la noche era un bartender muy joven pero con mucha clase a la hora de preparar los cocktails. En la medida de lo posible, entre cocktail y cocktail, nos daba charla. Con su autorización, saqué la cámara y me puse a sacarle fotos en acción. La carta es corta, pero tiene todo lo que uno esperaría de un bar con estilo francés: cocktails con calvados, con champagne y algún clásico como una reversión de Old Fashioned.



COCKTAILS
El viaje de sabores comenzó con el tan aclamado por las críticas Champagne Piña Colada, que revive uno de los clásicos de una forma muy particular. Cremoso, con un intenso sabor a coco y unas burbujas muy finas que le da el champagne. A la par del anterior, pedimos el I don’t feel like dancing que está elaborado con champagne, vodka, crema de vainilla clarificada y rosas, es fresco, efervescente, con champagne como actor principal.
La segunda tanda de cocktails tampoco desilusionó: Carol Channing y Tropical Old Fashioned. El primero, una explosión de frambuesas con un toque de champagne. El segundo, bourbon mezclado con un cordial de frutas tropicales. Ambos realmente bien logrados.
Cruzamos la puerta y salimos al exterior deseando estar en París, pero seguíamos en Londres, y la verdad, tan mal no estaba.
INFORMACIÓN
Web: www.coupette.co.uk Instagram: @coupettelondon Horarios: Abierto todos los días desde las 17:00 |