Ueno es uno de los barrios más completos de Tokyo. Tiene una gran estación de trenes y metros, una gastronomía variada y económica, varios centros comerciales, un hermoso parque con un lago y un pantano lleno de flores de loto. Y, como siempre en Japón, hay varios templos.

Ameya-Yokocho

La calle principal es la famosa Ameya-Yokocho. Yokocho significa callejón y el nombre Ameya fue colocado porque en esta calle se vendían artículos americanos luego de la segunda guerra mundial. Si bien Ameya es una sola calle, luego de algunas cuadras se divide en dos, y ambas son igual de comerciales. Acá podrán encontrar muchos restaurantes de diversas nacionalidades y a precios económicos (la gran mayoría venden comida china) y locales de vestimenta, calzado y valijas a precios increíblemente económicos. Es la típica feria de barrio, con todo colgado en el exterior.

Ueno Park 

Ueno también es hogar del Ueno Park, un parque que en su interior posee un zoológico, un pantano lleno de flores de loto, varios templos y hasta museos. Es normal encontrar personajes divertidos cantando o tocando algun instrumento. No abundan los espacios verdes para sentarse a hacer un picnic como en el Yoyogi, sino más bien es un parque urbano, con muchos senderos de cemento.

Ueno Park

Santuario Yushima Tenmangu

En Ueno hay un santuario muy peculiar, donde los estudiantes van a rezar o a pedir por sus estudios. El Santuario Yushima Tenmangu está consagrado a Sugawara Michizane, el dios del estudio.

Museo Nacional de Tokio

Ueno alberga el museo más importante de Tokio y posiblemente de todo Japón. El museo nacional dentro de sus 42 salas exhibe más de 88.500 objetos pertenecientes al arte medieval japonés y al lejano oriente. Sobresalen las colecciones de pintura japonesa, pero también la escultura, la cerámica, los trabajos en metal y los textiles. Para encontrar más información sobre el horario del museo ingresen a la página oficial acá. El precio es de 620 JPY por persona

Otros museos del Parque Ueno

Museo metropolitano de arte de Tokio: museo de arte, con variadas exposiciones temporales. Algunas de las exposiciones son gratuitas, hay otras que hay que abonar el ticket.

Museo nacional de ciencia: museo de ciencia e historia natural y teatro virtual de 360 grados. La entrada cuesta 620 yenes. 

Museo Shitamachi: está dedicado al shitamachi o barrio antiguo de Tokio y en él podemos ver cómo era la vida en el periodo de Meiji y periodo Showa. La entrada cuesta 300 yenes.

Museo nacional de arte occidental: Museo dedicado al arte occidental. La entrada cuesta 430 yenes, aunque es gratuito el segundo y cuarto sábado de cada mes.

Recorrido gastronómico 

Una de las cosas más importantes que este barrio ofrece, es la variedad gastronómica, así que a continuación les detallaré un recorrido gastronómico que hicimos con la empresa Secret Food Tours, y el cual recomiendo que hagan para poder probar de todo en un mismo dia.

  1. Comer sushi debajo de la estación del tren. Comí 3 piezas de sushi tamaño XL, preparadas por un sushiman con 40 años de experiencia en el rubro. El salmón tenía un gusto mantecoso imposible de comparar con el salmón de occidente.
  2. Degustar el típico set de almuerzo de un verdadero “salaryman”. Una bandeja con mas de 10 pequeños platitos, donde destacan la sopa miso, un flan salado de huevo, carne especiada y macerada durante varias horas, una tortilla de huevo dulce, rábano con salsa picante y un tempura gigante de langostino.
  3. Beber té verde en medio de la calle y de parado. Sobre Ameya, un señor te prepara un té verde muy sabroso para tomar al paso y seguir tu recorrido.
  4. Acá comienza la comida callejera. En un pequeño puesto escondido en una de las tantas cortadas que salen de la estación, sirven una especie de albóndiga de carne, empanada y frita, llamada Niku Korokke. Es MUY jugosa y con mucho sabor a cebolla (aunque no se la vea en la albóndiga)
  5. Las típicas gyozas de cerdo y ajo, embebidas en una salsa agridulce. El lugar es un típico bodegón japonés, pero con algo negativo: se permite fumar dentro.
  6. Siguiendo el camino del ferrocarril, llegamos a la anteúltima parada de la tarde. Como no podía ser de otra forma, terminamos en un Izakaya, comiendo toriyaki y tomando un vaso rebalsado de sake dulce. Yo no daba mas, pero siempre hay lugar para una copa extra de sake. Acá también se permitía fumar.
  7. ¿Simulamos que comimos sano durante todo el día? Terminamos el recorrido con una gran porción de melón verde. Como para darle un poco de respiro al cuerpo y comer algo refrescante.

Ueno es un barrio para dedicarle al menos un día completo y un imperdible si visitan Tokio. Queremos agradecer a la empresa Secret Food Tours por invitarnos a esta ruta gastronómica y a seguir descubriendo Tokio con ellos.

Aqui todo el detalle del tour https://www.secretfoodtours.com/tokyo/food-tours-tokyo/