Cuando me dijeron que había un bar que no tenia carta, fui un poco incrédulo. ¿Cómo van a trabajar sin una carta? Es normal, en un cocktail bar, que el bartender se salga de la carta. Un par de veces por noche suelen crear nuevos sabores a pedido del cliente. A pesar de esto, nunca me había pasado ir a un bar donde la carta no exista. Luego de pensarlo un segundo, se me vinieron a la mente dos preguntas. Con ambas confirmaría que tener un bar de estas características, es algo innovador y a la vez muy interesante.
- Si los bartenders igualmente todas las noches improvisan una gran parte de lo que sirven, ¿por qué no potenciar la creatividad y que el 100% de lo que sirven sea improvisado?
- ¿Qué mejor quetomar algo con las características que más me gustan? Es una forma muy innovadora de hacer marketing uno a uno.
No quedaba tan cerca del departamento como otros bares de mi lista. Tenía que caminar unas quince cuadras hacia el sur, hasta la zona de Bowery. Caminar en Nueva York, no es un problema, es un placer. Si se puede ir caminando, en NYC, elijo ir de esa forma. Me encanta ver la ciudad de las luces de noche. Es raro encontrarse en una calle solo, sin nadie alrededor, y de noche eso sucede seguido (o no tanto).
LLEGAR AL BAR
Al momento de llegar, seguí de largo. No pude reconocer la entrada. volví unos metros sobre mis pasos y vi una antigua sastrería, con una pequeña ventana que esbozaba un cartel “TAILORS – ALTERATIONS”. Me acerque a una puerta gris que estaba a la izquierda, con un pequeño cartel, que simulando ser el número del departamento, decía “AB”, Attaboy.



En cuanto entré me recibió una chica, muy amable, que no se demoró en ubicarme en uno de los laterales de la barra. Siempre intento estar en la barra, cuando la misma tiene laterales, me desespero por ese lugar. Desde ahí puedo ver dos cosas: la reacción de todos los clientes ante los cocktails y la forma de trabajar de los bartenders. El local esta bien armado, tiene una luz muy tenue y una barra larga. En cada rincón que encuentres hay una mesita, donde también te podés ubicar. El lugar es pequeño, asi que recomiendo ir temprano o tener paciencia. Decir cómo esta vestida la gente en el bar, estando en Nueva York, no es medida. Usualmente todos se visten bien.



PEDIR UN COCKTAIL
Ya me estaba poniendo impaciente cuando, finalmente, llegó la pregunta tan esperada: “¿Qué te gusta tomar?”. La misma chica que estaba en la puerta era la encargada de tomar el pedido. La pregunta tiene múltiples respuestas, puede ser algo en particular, como por ejemplo, un Manhattan, o algo que los acerque pero a lo que vos querés. En mi caso, mis respuestas fueron: “algo con whisky, pero que tenga algún sabor cítrico” y “lo que quieras, pero que tenga amaro Montenegro”. Cualquier fórmula de las antes mencionadas generan un resultado óptimo. Parecería que con solo dos palabras el bartender pudiese leer tu mente y crease algo con eso.
La creatividad no se detiene ahí. La cuenta te la traen dentro de un libro hueco. Aquel libro que tiene recetas invisibles. Recetas que se crean desde cero cada día. Recetas inexistentes, que dan como resultado una noche de improvisación. Donde, como una obra de teatro, cada cual tiene su rol, y lo intenta desempeñar de la mejor manera posible.
INFORMACIÓNDireccion: 134 Eldridge St, New York, NY 10002, EE. UU. VER MAPA Web: www.attaboy.us Instagram: @attaboy134 Horarios: Lun-Dom 18:00 a 04:00 |